La radio cuenta ya con una vida bastante añeja (un siglo), sin embargo, esto no le ha reducido en ningún momento la fuerza que como medio de comunicación tiene, incluso se le fortalecido, pues tiene un alcance mucho mayor y cada vez más.
La UNESCO implanto en el año 1946, el día mundial de la radio. Muchas personas, definen la radio como “magia”, pues es a través de ondas que se puede transmitir cualquier tipo de información, para hacerla llegar en cuestión de instantes.
La Radio se mantiene en su trono
Pese al avasallador mundo de la tecnología, la radio sigue subsistiendo, ni siquiera internet, ha podido quitarle su trono, y es que la radio tiene una cercanía real con sus oyentes, creando familias de éstos en todas partes del mundo.
Además, para muchos usuarios resulta muy gratificante escuchar la radio, porque deja dar rienda suelta a su imaginación, sin censura y sin ser juzgados, forman como una especie de complicidad. Una de las máximas ventajas que tiene la radio, es sin duda su portabilidad, pues básicamente es posible escucharla en cualquier parte del globo terráqueo, no se requiere hacer más que tocar el botón de encendido y listo, disfrutar de lo que deseemos, es incluso un excelente compañero para el trabajo, hacer las tareas del hogar, etc, ya que no se tiene que hacer más que escuchar.
Por eso creemos que esas personas que le describen como “magia”, están en lo cierto, ya que no es necesario más que encenderla para empezar a disfrutar a través de nuestro sentido del oído, de una linda música, de programas educativos e informativos, de novelas, comentarios, etc. En un momento podemos pasar de una programación a otra y seguir realizando nuestras tareas del día a día sin mayor complicación.
Aunque la radio ahora también está presente en las nuevas tecnologías (internet), no podemos dejar de verle como el medio de comunicación que no requiere más allá de la magia de sus ondas para disfrutarle.
No tenemos duda de que la radio, seguirá siendo el medio de comunicación más utilizado en el mundo y será muy difícil sino es que imposible bajarlo de su trono.